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Mostrando entradas de abril, 2019

Juan 4,43-54

Juan 4,43-54 JESÚS EN GALILEA.  43 Pasados aquellos dos días, partió para Galilea. 44 Ahora bien, Jesús mismo atestiguó que ningún profeta es honrado en su patria. 45 Cuando llegó a Galilea, fue recibido por los galileos, que habían visto todas las grandes cosas hechas por Él en Jerusalén durante la fiesta; porque ellos también habían ido a la fiesta. CURACIÓN DEL HIJO DEL CORTESANO. 46 Fue, pues, otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y había un cortesano cuyo hijo estaba enfermo en Cafarnaúm. 47 Cuando él oyó que Jesús había vuelto de Judea a Galilea, se fue a encontrarlo, y le rogó que bajase para sanar a su hijo, porque estaba para morir. 48 Jesús le dijo: “¡Si no veis signos y prodigios, no creeréis!”. 49 Respondióle el cortesano: “Señor, baja antes que muera mi hijo”. 50 Jesús le dijo: “Ve, tu hijo vive”. Creyó este hombre a la palabra que le dijo Jesús y se puso en marcha. 51 Ya bajaba, cuando encontró a algunos de sus criados que l

Juan 3,7b-15

Juan 3,7b-15 7 No te admires de que te haya dicho: “Os es necesario nacer de lo alto”. 8 El viento sopla donde quiere; tú oyes su sonido, pero no sabes de dónde viene, ni adónde va. Así acontece con todo aquel que ha nacido del espíritu”. 9 A lo cual Nicodemo le dijo: “¿Cómo puede hacerse esto?” 10 Jesús le respondió: “¿Tú eres el doctor de Israel, y no entiendes esto? 11 En verdad, en verdad, te digo: nosotros hablamos lo que sabemos, y atestiguamos lo que hemos visto, y vosotros no recibís nuestro testimonio. 12 Si cuando os digo las cosas de la tierra, no creéis, ¿cómo creeréis si os digo las cosas del cielo? 13 Nadie ha subido al cielo, sino Aquel que descendió del cielo, el Hijo del hombre. 14 Y como Moisés, en el desierto, levantó la serpiente, así es necesario que el Hijo del hombre sea levantado. 15 Para que todo el que cree tenga en Él vida eterna”. 1192-La serpiente de bronce que Moisés colocó en lo alto de un varal http://bit.ly/2VvFITZ 1376-Las Corrientes

Juan 3, 1-8

Juan 3, 1-8 EL NUEVO NACIMIENTO POR LA FE 1 Había un hombre de los fariseos, llamado Nicodemo, principal entre los judíos. 2 Vino de noche a encontrarle y le dijo: “Rabí, sabemos que has venido de parte de Dios, como maestro, porque nadie puede hacer los milagros que Tú haces, si Dios no está con él”. 3 Jesús le respondió: “En verdad, en verdad, te digo, si uno no nace de lo alto, no puede ver el reino de Dios”. 4 Nicodemo le dijo: “¿Cómo puede nacer un hombre, siendo viejo? ¿Puede acaso entrar en el seno de su madre y nacer de nuevo?” 5 Jesús le respondió: “En verdad, en verdad, te digo, si uno no nace del agua y del espíritu, no puede entrar en el reino de los cielos. 6 Lo nacido de la carne, es carne; y lo nacido del espíritu, es espíritu. 7 No te admires de que te haya dicho: “Os es necesario nacer de lo alto”. 8 El viento sopla donde quiere; tú oyes su sonido, pero no sabes de dónde viene, ni adónde va. Así acontece con todo aquel que ha nacido del espíritu”. 1073

Juan 20,19-31

Juan 20,19-31 19 A la tarde de ese mismo día, el primero de la semana, y estando, por miedo a los judíos, cerradas las puertas (de) donde se encontraban los discípulos, vino Jesús y, de pie en medio de ellos, les dijo: ¡Paz a vosotros!” 20 Diciendo esto, les mostró sus manos y su costado; y los discípulos se llenaron de gozo, viendo al Señor. 21 De nuevo les dijo: ¡Paz a vosotros! Como mi Padre me envió, así Yo os envío”. 22 Y dicho esto, sopló sobre ellos, y les dijo: “Recibid el Espíritu Santo: 23 a quienes perdonareis los pecados, les quedan perdonados; y a quienes se los retuviereis, quedan retenidos”. INCREDULIDAD DE TOMÁS. 24 Ahora bien Tomás, llamado Dídimo, uno de los Doce, no estaba con ellos cuando vino Jesús. 25 Por tanto le dijeron los otros: “Hemos visto al Señor”. Él les dijo: “Si yo no veo en sus manos las marcas de los clavos, y no meto mi dedo en el lugar de los clavos, y no pongo mi mano en su costado, de ninguna manera creeré”. 26 Ocho días después, es

Marcos 16, 9-15

Marcos 16, 9-15 JESÚS SE APARECE A LOS SUYOS.  9 Resucitado, pues, temprano, el primer día de la semana, se apareció primeramente a María la Magdalena, de la cual había echado siete demonios. 10 Ella fue y lo anunció a los que habían estado con Él, que se hallaban afligidos y llorando. 11 Pero ellos al oír que vivía y que había sido visto por ella, no creyeron. 12 Después de estas cosas se mostró en el camino, con otra figura, a dos de ellos, que iban a una granja. 13 Estos también fueron a anunciarlo a los demás; pero tampoco a ellos les creyeron. MISIÓN DE LOS APÓSTOLES.  14 Por último, se les apareció a los once mientras comían y les echó en cara su falta de fe y dureza de corazón porque no habían creído a los que lo habían visto a Él resucitado de entre los muertos. 15 Y les dijo: “Id por el mundo entero, predicad el Evangelio a toda la creación. 1543-La Ascensión- año 2018-segunda parte http://bit.ly/2GISs0a 1378 Una reflexión más sobre la Ascensión de Nuestro

Juan 21,1-14

Juan 21,1-14 APARICIÓN JUNTO AL MAR DE TIBERÍADES. 1 Después de esto, Jesús se manifestó otra vez a los discípulos a la orilla del mar de Tiberíades. He aquí cómo: 2 Simón Pedro, Tomás, llamado Dídimo; Natanael, el de Caná de Galilea; los hijos de Zebedeo, y otros dos discípulos, se encontraban juntos. 3 Simón Pedro les dijo: “Yo me voy a pescar”. Le dijeron: “Vamos nosotros también contigo”. Partieron, pues, y subieron a la barca, pero aquella noche no pescaron nada. 4 Cuando ya venía la mañana, Jesús estaba sobre la ribera, pero los discípulos no sabían que era Jesús. 5 Jesús les dijo: “Muchachos, ¿tenéis algo para comer?” Le respondieron: “No”. 6 Díjoles entonces: “Echad la red al lado derecho de la barca, y encontraréis”. La echaron, y ya no podían arrastrarla por la multitud de los peces. 7 Entonces el discípulo, a quien Jesús amaba, dijo a Pedro: “¡Es el Señor!” Oyendo que era el Señor, Simón Pedro se ciñó la túnica –porque estaba desnudo– y se echó al mar. 8 Los otr

Lucas 24,35-48

Lucas 24,35-48  Jesús se aparece a los discípulos (Mt. 28.16-20; Mr. 16.14-18; Jn. 20.19-23)  35 Y ellos contaron lo que les había pasado en el camino, y cómo se hizo conocer de ellos en la fracción del pan.  36 Aún estaban hablando de esto cuando Él mismo se puso en medio de ellos diciendo: “Paz a vosotros”.  37 Mas ellos, turbados y atemorizados, creían ver un espíritu.  38 Él entonces les dijo: “¿Por qué estáis turbados? y ¿por qué se levantan dudas en vuestros corazones?  39 Mirad mis manos y mis pies: soy Yo mismo. Palpadme y ved que un espíritu no tiene carne ni husos, como veis que Yo tengo”.  40 Y diciendo esto, les mostró sus manos y sus pies.  41 Como aún desconfiaran, de pura alegría, y se estuvieran asombrados, les dijo: “¿Tenéis por ahí algo de comer?” 42 Le dieron un trozo de pez asado.  43 Lo tomó y se lo comió a la vista de ellos.  DESPEDIDA Y ASCENSIÓN.  44 Después les dijo: “Esto es aquello que Yo os decía, cuando estaba todavía con v

Lucas 24,13-35

Lucas 24,13-35  LOS DISCÍPULOS DE EMAÚS. 13 Y he aquí que, en aquel mismo día, dos de ellos se dirigían a una aldea, llamada Emaús, a ciento sesenta estadios de Jerusalén.  14 E iban comentando entre sí todos estos acontecimientos.  15 Y sucedió que, mientras ellos platicaban y discutían, Jesús mismo se acercó y se puso a caminar con ellos.  16 Pero sus ojos estaban deslumbrados para que no lo conociesen.  17 Y les dijo: “¿Qué palabras son éstas que tratáis entre vosotros andando?”  18 Y se detuvieron con los rostros entristecidos. Uno, llamado Cleofás, le respondió: “Eres Tú el único peregrino, que estando en Jerusalén, no sabes lo que ha sucedido en ella en estos días?”  19 Les dijo: “¿Qué cosas?” Y ellos: “Lo de Jesús el Nazareno, que fué varón profeta, poderoso en obra y palabra delante de Dios y de todo el pueblo,  20 y cómo lo entregaron nuestros sumos sacerdotes y nuestros magistrados para ser condenado a muerte, y lo crucificaron.  21 Nosotros, a la verd

Juan 20, 11-18

Juan 20,11-18 Jesús se aparece a María Magdalena (Mr. 16.9-11)  11 Pero María estaba fuera llorando junto al sepulcro; y mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro;  12 y vio a dos ángeles con vestiduras blancas, que estaban sentados el uno a la cabecera, y el otro a los pies, donde el cuerpo de Jesús había sido puesto.  13 Y le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde le han puesto.  14 Cuando había dicho esto, se volvió, y vio a Jesús que estaba allí; mas no sabía que era Jesús.  15 Jesús le dijo: Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas? Ella, pensando que era el hortelano, le dijo: Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo lo llevaré.  16 Jesús le dijo: !!María! Volviéndose ella, le dijo: !!Raboni! (que quiere decir, Maestro).  17 Jesús le dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a

Mateo 28,8-15

Mateo 28,8-15 8 Entonces ellas, saliendo del sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos, 9 he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: !!Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. 10 Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán.  El informe de la guardia 11 Mientras ellas iban, he aquí unos de la guardia fueron a la ciudad, y dieron aviso a los principales sacerdotes de todas las cosas que habían acontecido. 12 Y reunidos con los ancianos, y habido consejo, dieron mucho dinero a los soldados, 13 diciendo: Decid vosotros: Sus discípulos vinieron de noche, y lo hurtaron, estando nosotros dormidos. 14 Y si esto lo oyere el gobernador, nosotros le persuadiremos, y os pondremos a salvo. 15 Y ellos, tomando el dinero, hicieron como se les había instruido. Este dicho se ha divulgado entre los jud

Juan 20, 1-9

  Juan 20,1-9 La resurrección (Mt. 28.1-10; Mr. 16.1-8; Lc. 24.1-12)  1 El primer día de la semana, María Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro; y vio quitada la piedra del sepulcro.  2 Entonces corrió, y fue a Simón Pedro y al otro discípulo, aquel al que amaba Jesús, y les dijo: Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto. 3 Y salieron Pedro y el otro discípulo, y fueron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos; pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro, y llegó primero al sepulcro. 5 Y bajándose a mirar, vio los lienzos puestos allí, pero no entró. 6 Luego llegó Simón Pedro tras él, y entró en el sepulcro, y vio los lienzos puestos allí, 7 y el sudario, que había estado sobre la cabeza de Jesús, no puesto con los lienzos, sino enrollado en un lugar aparte. 8 Entonces entró también el otro discípulo, que había venido primero al sepulcro; y vio, y creyó. 9 Porque aún no habían entendido la Escritura, que era necesario q

Lucas 24,1-12

  Lucas 24,1-12 La resurrección (Mt. 28.1-10; Mr. 16.1-8; Jn. 20.1-10)  1 El primer día de la semana, muy de mañana, vinieron al sepulcro, trayendo las especias aromáticas que habían preparado, y algunas otras mujeres con ellas. 2 Y hallaron removida la piedra del sepulcro; 3 y entrando, no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. 4 Aconteció que estando ellas perplejas por esto, he aquí se pararon junto a ellas dos varones con vestiduras resplandecientes;  5 y como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra, les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? 6 No está aquí, sino que ha resucitado. Acordaos de lo que os habló, cuando aún estaba en Galilea, 7 diciendo: Es necesario que el Hijo del Hombre sea entregado en manos de hombres pecadores, y que sea crucificado, y resucite al tercer día. 8 Entonces ellas se acordaron de sus palabras,  9 y volviendo del sepulcro, dieron nuevas de todas estas cosas a los once, y a todos los demás. 10 Eran María

Juan 18,1-40.19,1-42

1525-El Siervo Sufriente de Isaías http://bit.ly/2UNuo5V 1067  Sermón de Viernes Santo, año 2016 http://bit.ly/2Pjad9S 1330 Viernes Santo -La Última Cena II  http://bit.ly/2ZlDYLT 899 Sermón de Viernes Santo 2015 http://bit.ly/2PhzDF8 Juan 18,1-40.19,1-42  Arresto de Jesús (Mt. 26.47-56; Mr. 14.43-50; Lc. 22.47-53)  1 Habiendo dicho Jesús estas cosas, salió con sus discípulos al otro lado del torrente de Cedrón, donde había un huerto, en el cual entró con sus discípulos. 2 Y también Judas, el que le entregaba, conocía aquel lugar, porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos. 3 Judas, pues, tomando una compañía de soldados, y alguaciles de los principales sacerdotes y de los fariseos, fue allí con linternas y antorchas, y con armas. 4 Pero Jesús, sabiendo todas las cosas que le habían de sobrevenir, se adelantó y les dijo: ¿A quién buscáis?  5 Le respondieron: A Jesús nazareno. Jesús les dijo: Yo soy. Y estaba también con ellos Judas,

Juan 13,1-15

Juan 13,1-15 1 ANTES de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que su hora había venido para que pasase de este mundo al Padre, como había amado á los suyos que estaban en el mundo, amólos hasta el fin. 2 Y la cena acabada, como el diablo ya había metido en el corazón de Judas, hijo de Simón Iscariote, que le entregase, 3 Sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había salido de Dios, y á Dios iba, 4 Levántase de la cena, y quítase su ropa, y tomando una toalla, ciñóse. 5 Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó á lavar los pies de los discípulos, y á limpiarlos con la toalla con que estaba ceñido. 6 Entonces vino á Simón Pedro; y Pedro le dice: ¿Señor, tú me lavas los pies? 7 Respondió Jesús, y díjole: Lo que yo hago, tú no entiendes ahora; mas lo entenderás después. 8 Dícele Pedro: No me lavarás los pies jamás. Respondióle Jesús: Si no te lavare, no tendrás parte conmigo. 9 Dícele Simón Pedro: Señor, no sólo mis pies, mas aun las mano

Mateo 26,14-25

Mateo 26,14-25 Judas ofrece entregar a Jesús (Mr. 14.10-11; Lc. 22.3-6)  14 Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes, 15 y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata. 16 Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle. Institución de la Cena del Señor (Mr. 14.12-25; Lc. 22.7-23; Jn. 13.21-30; 1 Co. 11.23-26) 17 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, vinieron los discípulos a Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres que preparemos para que comas la pascua? 18 Y él dijo: Id a la ciudad a cierto hombre, y decidle: El Maestro dice: Mi tiempo está cerca; en tu casa celebraré la pascua con mis discípulos. 19 Y los discípulos hicieron como Jesús les mandó, y prepararon la pascua. 20 Cuando llegó la noche, se sentó a la mesa con los doce. 21 Y mientras comían, dijo: De cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar. 22 Y entristecidos en gran manera, com

Juan 13, 21-33. 36-38

Juan 13, 21-33.36-38 Jesús anuncia la traición de Judas (Mt. 26.20-25; Mr. 14.17-21; Lc. 22.21-23)  21 Habiendo dicho Jesús esto, se conmovió en espíritu, y declaró y dijo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar. 22 Entonces los discípulos se miraban unos a otros, dudando de quién hablaba. 23 Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado al lado de Jesús. 24 A éste, pues, hizo señas Simón Pedro, para que preguntase quién era aquel de quien hablaba. 25 El entonces, recostado cerca del pecho de Jesús, le dijo: Señor, ¿quién es? 26 Respondió Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de Simón. 27 Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo más pronto. 28 Pero ninguno de los que estaban a la mesa entendió por qué le dijo esto. 29 Porque algunos pensaban, puesto que Judas tenía la bolsa, que Jesús le decía: Compra lo que necesitam

Juan 12,1-11

Juan 12,1-11 Jesús es ungido en Betania (Mt. 26.6-13; Mr. 14.3-9)  12 Seis días antes de la pascua, vino Jesús a Betania, donde estaba Lázaro, el que había estado muerto, y a quien había resucitado de los muertos. 2 Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él. 3 Entonces María tomó una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y los enjugó con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del perfume.  4 Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar: 5 ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres? 6 Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella. 7 Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto.  8 Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis. El co

Lucas 22,14-71.23,1-56

768 Domingo de Ramos II http://bit.ly/2VNfZU0 767 Domingo de Ramos http://bit.ly/2UQfECJ 1063-Sermón de Domingo de Ramos-año 2016 http://bit.ly/2IjokLY 1325-Entrada de Jesús en Jerusalén-2017 http://bit.ly/2v1PRIX   Lucas 22,14-71.23,1-56.  Llegada la hora, Jesús se sentó a la mesa con los Apóstoles y les dijo: "He deseado ardientemente comer esta Pascua con ustedes antes de mi Pasión, porque les aseguro que ya no la comeré más hasta que llegue a su pleno cumplimiento en el Reino de Dios". Y tomando una copa, dio gracias y dijo: "Tomen y compártanla entre ustedes. Porque les aseguro que desde ahora no beberé más del fruto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios".  Luego tomó el pan, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: "Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía". Después de la cena hizo lo mismo con la copa, diciendo: "Esta copa es la Nueva Alianza sellada con mi Sa

Juan 11,45-56

Juan 11,45-56 El complot para matar a Jesús (Mt. 26.1-5; Mr. 14.1-2; Lc. 22.1-2)   45 Entonces muchos de los judíos que habían venido para acompañar a María, y vieron lo que hizo Jesús, creyeron en él.  46 Pero algunos de ellos fueron a los fariseos y les dijeron lo que Jesús había hecho.  47 Entonces los principales sacerdotes y los fariseos reunieron el concilio, y dijeron: ¿Qué haremos? Porque este hombre hace muchas señales.  48 Si le dejamos así, todos creerán en él; y vendrán los romanos, y destruirán nuestro lugar santo y nuestra nación.  49 Entonces Caifás, uno de ellos, sumo sacerdote aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada;  50 ni pensáis que nos conviene que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación perezca. 51 Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación;  52 y no solamente por la nación, sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban

Juan 10,31-42

Juan 10,31-42 31 Entonces los judíos volvieron a tomar piedras para apedrearle. 32 Jesús les respondió: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedreáis? 33 Le respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te haces Dios.  34 Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? 35 Si llamó dioses a aquellos a quienes vino la palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada), 36 ¿al que el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?  37 Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis.  38 Mas si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.  39 Procuraron otra vez prenderle, pero él se escapó de sus manos. 40 Y se fue de nuevo al otro lado del Jordán, al lugar donde primero había estado bautizando Juan; y se qued