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Mostrando entradas de diciembre, 2018

Juan 1,1-18

Juan 1,1-18 El Verbo hecho carne  1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. 5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella. 6 Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan. 7 Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él. 8 No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz. 9 Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo. 10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció. 11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. 12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; 13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de volunta

Lucas 2,41-52

Lucas 2,41-52 41 E iban sus padres todos los años á Jerusalen en la fiesta de la Pascua. 42 Y cuando fue de doce años, subieron ellos á Jerusalen conforme á la costumbre del día de la fiesta. 43 Y acabados los días, volviendo ellos, se quedó el niño Jesús en Jerusalen, sin saberlo José y su madre. 44 Y pensando que estaba en la compañía, anduvieron camino de un día; y le buscaban entre los parientes y entre los conocidos: 45 Mas como no le hallasen, volvieron á Jerusalen buscándole. 46 Y aconteció, que tres días después le hallaron en el templo, sentado en medio de los doctores, oyéndoles y preguntándoles.  47 Y todos los que le oían, se pasmaban de su entendimiento y de sus respuestas. 48 Y cuando le vieron, se maravillaron; y díjole su madre: Hijo, ¿por qué nos has hecho así? He aquí, tu padre y yo te hemos buscado con dolor. 49 Entonces él les dice: ¿Qué hay? ¿por qué me buscabais? ¿No sabíais que en los negocios de mi Padre me conviene estar? 50 Mas ellos no entendier

Lucas 2,22-35

Lucas 2,22-35 22 Y cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, conforme a la ley de Moisés, le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor 23 (como está escrito en la ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor. 24 y para ofrecer conforme a lo que se dice en la ley del Señor: Un par de tórtolas, o dos palominos. 25 Y he aquí había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él. 26 Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor. 27 Y movido por el Espíritu, vino al templo. Y cuando los padres del niño Jesús lo trajeron al templo, para hacer por él conforme al rito de la ley, 28 él le tomó en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo: 29 Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz, Conforme a tu palabra; 30 Porque han visto mis ojos tu salvación, 31 La cual has preparado en presencia de tod

Mateo 2, 13-18

Raquel llora por sus hijos. Fresco del siglo XIV, monasterio de Marko (Macedonia)  Mateo 2,13-18 Matanza de los niños  13 Después que partieron ellos, he aquí un ángel del Señor apareció en sueños a José y dijo: Levántate y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y permanece allá hasta que yo te diga; porque acontecerá que Herodes buscará al niño para matarlo. 14 Y él, despertando, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto, 15 y estuvo allá hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliese lo que dijo el Señor por medio del profeta, cuando dijo: De Egipto llamé a mi Hijo. 16 Herodes entonces, cuando se vio burlado por los magos, se enojó mucho, y mandó matar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores, conforme al tiempo que había inquirido de los magos. 17 Entonces se cumplió lo que fue dicho por el profeta Jeremías, cuando dijo: 18 Voz fue oída en Ramá, Grande lamentación, lloro y gemido; Raquel que llora a s

Juan 20,2-8

Juan 20,2-8 2 Entonces corrió, y fue a Simón Pedro y al otro discípulo, aquel al que amaba Jesús, y les dijo: Se han llevado del sepulcro al Señor, y no sabemos dónde le han puesto. 3 Y salieron Pedro y el otro discípulo, y fueron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos; pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro, y llegó primero al sepulcro. 5 Y bajándose a mirar, vio los lienzos puestos allí, pero no entró.  6 Luego llegó Simón Pedro tras él, y entró en el sepulcro, y vio los lienzos puestos allí, 7 y el sudario, que había estado sobre la cabeza de Jesús, no puesto con los lienzos, sino enrollado en un lugar aparte. 8 Entonces entró también el otro discípulo, que había venido primero al sepulcro; y vio, y creyó. 1069 Maria Magdalena fue al sepulcro 1481 Fiesta de san Juan Evangelista: san Juan en su faceta de pastor   858-Reflexiones acerca de la I Epístola del apóstol San Juan (IV)  857-Reflexiones acerca de la I Epístola del apóstol San Juan (III

Mateo 10, 17-22

Mateo 10,17-22  17 »Tengan cuidado con la gente; los entregarán a los tribunales y los azotarán en las sinagogas. 18 Por mi causa los llevarán ante gobernadores y reyes para dar testimonio a ellos y a los gentiles. 19 Pero, cuando los arresten, no se preocupen por lo que van a decir o cómo van a decirlo. En ese momento se les dará lo que han de decir, 20 porque no serán ustedes los que hablen, sino que el Espíritu de su Padre hablará por medio de ustedes. 21 »El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo. Los hijos se rebelarán contra sus padres y harán que los maten. 22 Por causa de mi nombre todo el mundo los odiará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. 1583 Sencillos como palomas  (Mateo 10, 16-23)

Juan 1,1-18

Juan 1,1-18 El Verbo hecho carne  1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. 5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella. 6 Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan. 7 Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él. 8 No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz. 9 Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo. 10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció. 11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. 12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; 13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de volunt

Lucas 2,1-14

Lucas 2,1-14 Nacimiento de Jesús y visita de los pastores 1 Sucedió que por aquellos días salió un edicto de César Augusto ordenando que se empadronarse todo el mundo. 2 Este primer empadronamiento tuvo lugar siendo gobernador de Siria Cirino. 3 Iban todos a empadronarse, cada uno a su ciudad. 4 Subió también José desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por ser él de la casa y familia de David, 5 para empadronarse con María, su esposa, que estaba encinta. 6 Y sucedió que, mientras ellos estaban allí, se le cumplieron los días del alumbramiento, 7 y dio a luz a su hijo primogénito, le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en el alojamiento. 8 Había en la misma comarca algunos pastores, que dormían al raso y vigilaban por turno durante la noche su rebaño. 9 Se les presentó el Angel del Señor, y la gloria del Señor los envolvió en su luz; y se llenaron de temor. 10 El ángel les dijo: "N

Lucas 1, 39-45

Lucas 1, 39-45  María visita a Isabel  39 En aquellos días, levantándose María, fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá; 40 y entró en casa de Zacarías, y saludó a Isabel. 41 Y aconteció que cuando oyó Isabel la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; e Isabel fue llena del Espíritu Santo, 42 y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. 43 ¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? 44 Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. 45 Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor.   1692 El Magnificat, IV parte 

Lucas 1,46-56.

Lucas 1,46-56 El Magnificat 46 Y dijo María: "Engrandece mi alma al Señor 47 y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador 48 porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava , por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada, 49 porque ha hecho en mi favor maravillas el Poderoso, Santo es su nombre 50 y su misericordia alcanza de generación en generación a los que le temen. 51 Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son soberbios en su propio corazón. 52 Derribó a los potentados de sus tronos y exaltó a los humildes . 53 A los hambrientos colmó de bienes y despidió a los ricos sin nada. 54 Acogió a Israel, su siervo , acordándose de la misericordia 55 -como había anunciado a nuestros padres - en favor de Abraham y de su linaje por los siglos". 56 María permaneció con ella unos tres meses y se volvió a su casa. 1690 El Magnificat, II parte 1691 El Magnificat, III parte 

Lucas 1, 39-45

Lucas 1, 39-45  María visita a Isabel  39 En aquellos días, levantándose María, fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá; 40 y entró en casa de Zacarías, y saludó a Isabel. 41 Y aconteció que cuando oyó Isabel la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; e Isabel fue llena del Espíritu Santo, 42 y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. 43 ¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? 44 Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. 45 Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor. 1688 El Cántico de Zacarías, el de María y el de Simeón  1689 El Magnificat, I parte 

Lucas 1,26-38

Lucas 1,26-38 Anuncio del nacimiento de Jesús  26 A los seis meses, Dios envió al ángel Gabriel a Nazaret, pueblo de Galilea, 27 a visitar a una joven virgen comprometida para casarse con un hombre que se llamaba José, descendiente de David. La virgen se llamaba María. 28 El ángel se acercó a ella y le dijo: —¡Alegrate llena de gracia! El Señor está contigo. 29 Ante estas palabras, María se perturbó, y se preguntaba qué podría significar este saludo. 30 —No tengas miedo, María; Dios te ha concedido su favor —le dijo el ángel—. 31 Quedarás encinta y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32 Él será un gran hombre, y lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios el Señor le dará el trono de su padre David, 33 y reinará sobre el pueblo de Jacob para siempre. Su reinado no tendrá fin. 34 —¿Cómo podrá suceder esto —le preguntó María al ángel—, puesto que no conozco varón? 35 — El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra . Así que

Lucas 1,5-25

Lucas 1,5-25 Anuncio del nacimiento de Juan 5 Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote llamado Zacarías, de la clase de Abías; su mujer era de las hijas de Aarón, y se llamaba Isabel. 6 Ambos eran justos delante de Dios, y andaban irreprensibles en todos los mandamientos y ordenanzas del Señor. 7 Pero no tenían hijo, porque Isabel era estéril, y ambos eran ya de edad avanzada. 8 Aconteció que ejerciendo Zacarías el sacerdocio delante de Dios según el orden de su clase, 9 conforme a la costumbre del sacerdocio, le tocó en suerte ofrecer el incienso, entrando en el santuario del Señor. 10 Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando a la hora del incienso. 11 Y se le apareció un ángel del Señor puesto en pie a la derecha del altar del incienso. 12 Y se turbó Zacarías al verle, y le sobrecogió temor. 13 Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Isabel te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. 14 Y te

Mateo 1, 18-24

Mateo 1,18-24  Origen de Jesucristo  18 El origen de Jesucristo fue éste: María, su madre, estaba comprometida para casarse con José; pero antes que vivieran juntos, se encontró encinta por el poder del Espíritu Santo. 19 José, su marido, que era un hombre justo y no quería denunciar públicamente a María, decidió separarse de ella en secreto. 20 Ya había pensado hacerlo así, cuando un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, descendiente de David, no tengas miedo de tomar a María por esposa, porque su hijo lo ha concebido por el poder del Espíritu Santo. 21 María tendrá un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Se llamará así porque salvará a su pueblo de sus pecados.» 22 Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había dicho por medio del profeta: 23 «La virgen quedará encinta y tendrá un hijo, al que pondrán por nombre Emanuel» (que significa: «Dios con nosotros»). 24 Cuando José despertó del sueño, hizo lo que el ángel del Señor le había m

Mateo 1,1-17

Mateo 1,1-17 Genealogía de Jesucristo  1 Tabla genealógica de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham: 2 Abraham fue el padre de Isaac; Isaac, padre de Jacob; Jacob, padre de Judá y de sus hermanos; 3 Judá, padre de Fares y de Zera, cuya madre fue Tamar; Fares, padre de Jezrón; Jezrón, padre de Aram; 4 Aram, padre de Aminadab; Aminadab, padre de Naasón; Naasón, padre de Salmón; 5 Salmón, padre de Booz, cuya madre fue Rajab; Booz, padre de Obed, cuya madre fue Rut; Obed, padre de Isaí; 6 e Isaí, padre del rey David. David fue el padre de Salomón, cuya madre había sido la esposa de Urías; 7 Salomón, padre de Roboán; Roboán, padre de Abías; Abías, padre de Asá; 8 Asá, padre de Josafat; Josafat, padre de Jorán; Jorán, padre de Uzías; 9 Uzías, padre de Jotán; Jotán, padre de Acaz; Acaz, padre de Ezequías; 10 Ezequías, padre de Manasés; Manasés, padre de Amón; Amón, padre de Josías; 11 y Josías, padre de Jeconías[b] y de sus hermanos en tiempos de la depor

Sermones para Navidad

 2017 1478 Sermón de la misa de gallo  Las menciones de Dios en el Libro de Sabiduría para entender qué es el Nacimiento de Cristo 1479 Sermón del día de Navidad El prólogo de San Juan y el prólogo de los demás Evangelios 1480 El Espíritu Santo y los predicadores (Mateo 10, 17-22)  2016 1260 Profecías sobre el Mesías II     Misa de Gallo, año 2016 1261 Profecías sobre el Mesías III         Misa del día de Navidad, año 2016   2015 1000 Sermón de la noche de Navidad, año 2015  2014 864-Sermón sobre el Tiempo II http://bit.ly/2LeikkA 863-Sermón sobre el Tiempo I  Misa de la tarde del 31 de diciembre de 2014 http://bit.ly/2OVH2Z9 862-Sermón sobre San José y San Juan Bautista   861-Sermón sobre los querubines III  Predicado en el tiempo de Navidad   860-Sermón sobre los querubines II  Predicado en la misa del día de Navidad 859-Sermón sobre los querubines I Predicado durante la misa de Gallo 2013 741-Encontraron a María 740-Sermón de Noch

Lucas 3,10-18

Lucas 3,10-18 (Juan 1.19-28) 10 Y la gente le preguntaba, diciendo: Entonces, ¿qué haremos? 11 Y respondiendo, les dijo: El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; y el que tiene qué comer, haga lo mismo.  12 Vinieron también unos publicanos para ser bautizados, y le dijeron: Maestro, ¿qué haremos? 13 Él les dijo: No exijáis más de lo que os está ordenado. 14 También le preguntaron unos soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué haremos? Y les dijo: No hagáis extorsión a nadie, ni calumniéis; y contentaos con vuestro salario.  15 Como el pueblo estaba en expectativa, preguntándose todos en sus corazones si acaso Juan sería el Cristo, 16 respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego. 17 Su aventador está en su mano, y limpiará su era, y recogerá el trigo en su granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará. 1

Mateo 17,10-13

Mateo 17,10-13  10 Entonces los discípulos le preguntaron a Jesús: —¿Por qué dicen los maestros de la ley que Elías tiene que venir primero? 11 —Sin duda Elías viene, y restaurará todas las cosas —respondió Jesús—. 12 Pero les digo que Elías ya vino, y no lo reconocieron, sino que hicieron con él todo lo que quisieron. De la misma manera va a sufrir el Hijo del hombre a manos de ellos. 13 Entonces entendieron los discípulos que les estaba hablando de Juan el Bautista. 1473 ¿Eres tú Elías? I (Juan 1, 6-28) 1474 ¿Eres tú Elías? II 1a lectura Libro de Eclesiástico 48,1-4.9-11 1 hasta que vino un profeta como un fuego, cuya palabra era como un horno ardiente. 2 Él les quitó la provisión de pan y en su celo los redujo a un pequeño número. 3 Por orden de Dios hizo que no lloviera, y tres veces hizo que cayera fuego. 4 ¡Qué terrible eras, Elías! ¡No hay nadie tan glorioso como tú!  9 Fuiste arrebatado al cielo en un torbellino, entre tropeles de fuego. 10 Está es

Mateo 11,16-19

Mateo 11,16-19 16 Mas ¿a qué compararé esta generación? Es semejante a los muchachos que se sientan en las plazas, y dan voces a sus compañeros, 17 diciendo: Os tocamos flauta, y no bailasteis; os endechamos, y no lamentasteis. 18 Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dicen: Demonio tiene. 19 Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: He aquí un hombre comilón, y bebedor de vino, amigo de publicanos y de pecadores. Pero la sabiduría es justificada por sus hijos. 1250 San Juan Bautista I (Mateo 11, 2-19) 1685-La parte más profunda del alma (Marcos 10, 17-21) 

Mateo 11, 11-15

Mateo 11, 11-15 11 De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él. 12 Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan. 13 Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan. 14 Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. 15 El que tiene oídos para oír, oiga. 1250 San Juan Bautista I (Mateo 11, 2-19)   1251 San Juan Bautista II 732-Sermón sobre San Juan Bautista II 731-Sermón sobre San Juan Bautista I (Mateo 11, 2- 11) o (Lucas 7, 18-28) 

Lucas 1, 39-48

Lucas 1, 39-48 María visita a Isabel 39 En aquellos días, levantándose María, fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá; 40 y entró en casa de Zacarías, y saludó a Isabel. 41 Y aconteció que cuando oyó Isabel la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; e Isabel fue llena del Espíritu Santo, 42 y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. 43 ¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? 44 Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. 45 Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor. 46 Entonces María dijo: Engrandece mi alma al Señor; 47 Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador. 48 Porque ha mirado la bajeza de su sierva; Pues he aquí, desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones. 1477 Se llenó Isabel del Espíritu Santo 1108 La visitación d

Mateo 18, 12-14

Mateo 18,12-14 12 ¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se descarría una de ellas, ¿no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se había descarriado? 13 Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más por aquélla, que por las noventa y nueve que no se descarriaron.  14 Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños. 1246 El buen pastor dejó las noventa y nueve ovejas en los montes  1189-La triple parábola de la moneda, la oveja y el hijo  (Lucas 15,1-32) o (Mateo 18, 10-14)

Lucas 5, 17-26

Lucas 5,17-26  Jesús sana a un paralítico (Mt. 9.1-8; Mr. 2.1-12)  17 Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar. 18 Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él. 19 Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús. 20 Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. 21 Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios? 22 Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? 23 ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecad

Lucas 3,1-6

Lucas 3,1-6 Predicación de Juan el Bautista (Mt. 3,1-12; Mr. 1,1-8; Jn. 1,19-28)  En el año decimoquinto del imperio de Tiberio César, siendo gobernador de Judea Poncio Pilato, y Herodes tetrarca de Galilea, y su hermano Felipe tetrarca de Iturea y de la provincia de Traconite, y Lisanias tetrarca de Abilinia, 2 y siendo sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino palabra de Dios a Juan, hijo de Zacarías, en el desierto. 3 Y él fue por toda la región contigua al Jordán, predicando el bautismo del arrepentimiento para perdón de pecados,  4 como está escrito en el libro de las palabras del profeta Isaías, que dice: Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas. 5 Todo valle se rellenará, Y se bajará todo monte y collado; Los caminos torcidos serán enderezados, Y los caminos ásperos allanados; 6 Y verá toda carne la salvación de Dios. 1519 Algunas consideraciones acerca de María en la misa I 1028 Primeras palabras del Evangelio

Lucas 1, 26-38

Lucas 1, 26-38 Anuncio del nacimiento de Jesús  26 A los seis meses, Dios envió al ángel Gabriel a Nazaret, pueblo de Galilea, 27 a visitar a una joven virgen comprometida para casarse con un hombre que se llamaba José, descendiente de David. La virgen se llamaba María. 28 El ángel se acercó a ella y le dijo: —¡Te saludo, tú que has recibido el favor de Dios! El Señor está contigo. 29 Ante estas palabras, María se perturbó, y se preguntaba qué podría significar este saludo. 30 —No tengas miedo, María; Dios te ha concedido su favor —le dijo el ángel—. 31 Quedarás encinta y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32 Él será un gran hombre, y lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios el Señor le dará el trono de su padre David, 33 y reinará sobre el pueblo de Jacob para siempre. Su reinado no tendrá fin. 34 —¿Cómo podrá suceder esto —le preguntó María al ángel—, puesto que no conozco varón? 35 —El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá

Mateo 9,27-31

Mateo 9,27-31 Dos ciegos reciben la vista  27 Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: !!Ten misericordia de nosotros, Hijo de David! 28 Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor. 29 Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho. 30 Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa. 31 Pero salidos ellos, divulgaron la fama de él por toda aquella tierra.   1611-El pectoral del sumo sacerdote, III parte 1389 Tus pecados te son perdonados  

Mateo 7,21.24-27

Mateo 7,21.24-27 Nunca os conocí (Lc. 13.25-27)  21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Los dos cimientos (Lc. 6.46-49)  24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 26 Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina. 932- No todo el que me dice Señor, Señor (Mateo 7, 21-23) 1610-El pectoral del sumo sacerdote, II parte  (extra) Salmo 118(117),1.8-9.19-21.25-27a.  ¡Den gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterno su amo

Mateo 15,29-37

Mateo 15,29-37 Numerosas curaciones junto al lago 29  Pasando de allí Jesús vino junto al mar de Galilea; subió al monte y se sentó allí. 30 Y se le acercó mucha gente trayendo consigo cojos, lisiados, ciegos, mudos y otros muchos; los pusieron a sus pies, y él los curó. 31 De suerte que la gente quedó maravillada al ver que los mudos hablaban, los lisiados quedaban curado, los cojos caminaban y los ciegos veían; y glorificaron al Dios de Israel. Segunda multiplicación de los panes 32 Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: "Siento compasión por la gente, porque hace ya tres días que permanecen conmigo y no tienen qué comer. Y no quiero despedirlos en ayunas, no sea que desfallezcan en el camino". 33 Le dicen los discípulos: "¿Cómo hacernos en un desierto con pan suficiente para saciar a una multitud tan grande?" 34 Díceles Jesús: ¿Cuántos panes tenéis?" Ellos dijeron: "Siete y unos pocos pececillos". 35 Él mandó a la gente acomodarse

Lucas 10,21-24

Lucas 10,21-24 Jesús se regocija (Mt. 11.25-27; 13.16-17)  21 En aquella misma hora Jesús se regocijó en el Espíritu, y dijo: Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó. 22 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. 23 Y volviéndose a los discípulos, les dijo aparte: Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis; 24 porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron. 1677 La gracia, IV parte  1203-Has escondido estas cosas a los sabios  1400 Dios le dijo a Moisés: Yo estoy contigo

Mateo 8, 5-11

Mateo 8,5-11 Jesús sana al criado del centurión  5 Y cuando entró Jesús en Capernaúm se le acercó un centurión suplicándole, 6 y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, sufriendo mucho. 7 Y Jesús le dijo*: Yo iré y lo sanaré. 8 Pero el centurión respondió y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; mas solamente di la palabra y mi criado quedará sano. 9 Porque yo también soy hombre bajo autoridad, con soldados a mis órdenes; y digo a éste: “Ve”, y va; y al otro: “Ven”, y viene; y a mi siervo: “Haz esto”, y lo hace. 10 Al oírlo Jesús, se maravilló y dijo a los que le seguían: En verdad os digo que en Israel no he hallado en nadie una fe tan grande. 11 Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.   1190 No soy digno de que entres en mi casa  (Lucas 7,1-10) 1676 La gracia, III parte  993 Comienzo del adviento

Mateo 25, 31-46

Mateo 25, 31-46 El juicio final 31 "Cuando el hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria. 32 Serán congregadas delante de él todas las naciones, y él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos. 33 Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. 34 Entonces dirá el Rey a los de su derecha: 'Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo, 35 Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis; 36 estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme.' 37 Entonces los justos le responderán: 'Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de beber? 38 ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y te vestimos? 39 ¿Cuándo te vimos enfermo o e