Lucas 7,31-35
31 ¿A qué, entonces, compararé los hombres de esta generación, y a qué son semejantes?
32 Son semejantes a los muchachos que se sientan en la plaza y se llaman unos a otros, y dicen: “Os tocamos la flauta, y no bailasteis; entonamos endechas, y no llorasteis”.
33 Porque ha venido Juan el Bautista, que no come pan, ni bebe vino, y vosotros decís: “Tiene un demonio”.
34 Ha venido el Hijo del Hombre, que come y bebe, y decís: “Mirad, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores”.
35 Pero la sabiduría es justificada por todos sus hijos.
Sermón 562 Cuántos sermones escuchamos en la Iglesia a lo largo de nuestra vida.