Ir al contenido principal

Lucas 11,5-13




Lucas 11,5-13


5 Luego les dijo: — Supongan que uno de ustedes va a medianoche a casa de un amigo y le dice: “Amigo, préstame tres panes,
6 porque otro amigo mío que está de viaje acaba de llegar a mi casa, y no tengo nada que ofrecerle”. 7 Supongan también que el otro, desde dentro, contesta: “Por favor, no me molestes ahora. Ya tengo la puerta cerrada y mis hijos y yo estamos acostados. ¡Cómo me voy a levantar para dártelos!”.
8 Pues bien, les digo que, aunque no se levante a darle los panes por razón de su amistad, al menos para evitar que lo siga molestando, se levantará y le dará todo lo que necesite.
9 Por eso les digo: Pidan y Dios los atenderá, busquen y encontrarán; llamen y Dios les abrirá la puerta.
10 Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, encuentra, y al que llama, Dios le abrirá la puerta. 11 ¿Qué padre entre ustedes, si su hijo le pide pescado, le dará una serpiente?
12 ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?
13 Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿cuanto más el Padre que está en el cielo dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan?

Sermón 2137 (1237): La profecía de Malaquías acerca del Sol de rectitud

Sermón  1151: Sermón sobre el Padrenuestro I

Entradas populares de este blog

Lucas 5,12-16

Lucas 5,12-16 Jesús sana a un leproso (Mt. 8.1-4; Mr. 1.40-45)  12 Sucedió que estando él en una de las ciudades, se presentó un hombre lleno de lepra, el cual, viendo a Jesús, se postró con el rostro en tierra y le rogó, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.  13 Entonces, extendiendo él la mano, le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante la lepra se fue de él. 14 Y él le mandó que no lo dijese a nadie; sino ve, le dijo, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificación, según mandó Moisés, para testimonio a ellos.  15 Pero su fama se extendía más y más; y se reunía mucha gente para oírle, y para que les sanase de sus enfermedades.  16 Mas él se apartaba a lugares desiertos, y oraba.  1015-Charla en Coatzacoalcos http://bit.ly/2FmZxV0  1016-Charla acerca de la obediencia al Obispo http://bit.ly/2Rkrsfq

Lucas 13,31-35

Lucas 13,31-35 (Mt. 23.37-39)  EL ZORRO HERODES. Lamento de Jesús sobre Jerusalén 31 En ese momento se acercaron algunos fariseos, para decirle: “¡Sal, vete de aquí, porque Herodes te quiere matar”. 32 Y les dijo: “Id a decir a ese zorro: He aquí que echo demonios y obro curaciones hoy y mañana; el tercer día habré terminado. 33 Pero hoy, mañana y al otro día, es necesario que Yo ande, porque no cabe que un profeta perezca fuera de Jerusalén”. ¡AY DE JERUSALÉN! 34 Jerusalén, Jerusalén, tú que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados, ¡cuántas veces quise Yo reunir a tus hijos, como la gallina reúne su pollada debajo de sus alas, y vosotros no lo habéis querido! 35 Ved que vuestra casa os va a quedar desierta. Yo os lo digo, no me volveréis a ver, hasta que llegue el tiempo en que digáis: “¡Bendito el que viene en nombre del Señor!” 634 - Jerusalén como símbolo del alma http://bit.ly/2owisqf

Lucas 12,8-12

  Lucas 12,8-12 A favor o en contra de Jesús (Mt 10,32-33; 12,32; 10,19-20; Mc 13,11)  8 Les digo, además, que a todo aquel que me reconozca delante de los demás, también el Hijo del hombre lo reconocerá delante de los ángeles de Dios. 9 Y, al contrario, si alguien me niega delante de los demás, también él será negado delante de los ángeles de Dios. 10 Si alguien habla contra el Hijo del hombre, podrá serle perdonado. Pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo, no será perdonado. 11 Cuando los lleven a ustedes a las sinagogas o ante los magistrados y las autoridades, no se preocupen de cómo han de hablar o qué han de decir en defensa propia, 12 porque en aquel mismo momento el Espíritu Santo les enseñará lo que deban decir. Sermón 182 - Todo se les podrá perdonar a los hombres menos la blasfemia contra el Espíritu Santo